Enfrentémoslo: A nadie le gusta vender.
Está bien, digamos que a casi nadie le gusta vender. Y aquí te va otra sentencia:
A nadie le gusta que le vendan
O si quieres recuerda el retorcijón que sientes cuando suena el teléfono y lo primero que escuchas es una voz diciendo:
Es usted quien toma las decisiones de inversión en su hogar?
Gracias a este tipo de experiencias hemos desarrollado inconscientemente una imagen negativa de los vendedores. Personalmente, cuando escucho hablar de ventas me viene a la mente la imagen de un lobo de las caricaturas con chaqueta a cuadros y diente de oro dándole palmadas en la espalda a sus compradores…
Es por culpa de esa imagen negativa que experimentamos cierta resistencia cuando intentan vendernos algo o, peor aún, cuando tenemos que venderle algo a alguien -ej: nuestra oportunidad de negocio –.
Yo llamo a esta resistencia Barrera Inconsciente Anti-Ventas.
Ahora miremos la otra cara de la moneda: A todos nos gusta comprar.
Cuando compramos algo por decisión propia sentimos una sensación de satisfacción y orgullo.
Cómo se Aplica todo esto a tu Oportunidad de Negocio MULTINIVEL?
Muy fácil… Deja de vender tu oportunidad de negocio!
Abandona el enfoque de “mi compañía es la mejor por esto y aquello”, “mi producto es el mejor por esto y lo otro”, “mi plan de compensación es excelente porque… “bla, bla, bla. Eso es vender y ya sabemos que no le gusta a nadie.
A tus prospectos les importa un comino si tu plan de compensación es binario o de matriz… lo que en verdad quieren saber es cómo pagar sus deudas o si es posible un miércoles cualquiera estar en clase de yoga o en el campo de golf sin pensar en nada más en esta vida.
Adopta una actitud mucho más enfocada en las necesidades de tus prospectos, conócelos, identifica sus problemas y ofréceles una solución.
Esto se logra dándoles información de valor sobre cómo satisfacer sus necesidades antes de mencionar siquiera tu oportunidad de negocios. Es lo que se conoce como pre-vender tu oportunidad.
Si utilizas este enfoque ganarás el respeto y la confianza de tus prospectos – algo clave, sobre todo para quienes trabajan en internet.
No solo bajarás más fácilmente su barrera anti-ventas sino que te diferenciaras del típico diente-de-oro, chaqueta-a-cuadros que te saca los pulmones con cada palmada del que hablabamos anteriormente.